1.- AUTOREGULACION DE LOS MEDIOS
La figura del “ombudsman” no tiene su origen en el
ámbito periodístico: Al parecer, su significado más primitivo “remite a la
persona que comprobaba en las comunidades escandinavas que las calles y
chimeneas estuvieran limpias. De ahí pasó a dar nombre a un cargo público
creado por primera vez en Suecia en 1809 y encargado de recibir y tramitar las
quejas ciudadanas acerca del funcionamiento del gobierno y la administración pública.
Es recién a fines de los años 60 que aparece la figura del ombudsmande la
prensa, como parte del Consejo de Prensa de Suecia. En el Perú el ombudsman es
un órgano constitucional autónomo creado por la Constitución Política del Perú
de 1993. Por lo tanto tenemos un marco legal de principios dado además por, la
ley de Radio y Televisión.
Ahora es tiempo de autorregulaciones,
especialmente éticas y en búsqueda de nuevas confianzas públicas. Si bien es
positivo tener en cuenta el rating o el tiraje de los diarios, lo que importa
es construir un balance ético entre lo que los medios ofrecen, lo que la gente
recibe de acuerdo a valores básicos y lo que se aporta a la democracia y el
desarrollo del país y del mundo.Debemos
entender que un medio de comunicación es algo más que una empresa periodística
y frecuentementeno genera grandes
ganancias, excepto por el formidable poder que puede alcanzar en las sociedad.
Un poder intangible, es cierto, pero no por ello menos real. El poder para transmitir
valores y significados compartidos, para informar, orientar y entretener; para fiscalizar los actos de autoridad,
denunciar las injusticias y buscar la verdad.
Este
poder se ha visto incrementado en esta “sociedad de la información” en que
vivimos, en donde la comunicación es instantánea y lo que sucede en otros
lugares del mundo es posible presenciarlo
en tiempo real en todo el planeta. Sobre
todo cuando las grandes utopías, los proyectos colectivos y la
participación social, han cedido terreno a favor de la individuación, la
democracia medial o de audiencias, donde los medios han devenido, prácticamente, en el espacio privilegiado de socialización de significados
compartidos. En función de ese rol social que cumplen los medios de
comunicación, es del mayor interés de la sociedad asegurar una amplia libertad
de expresión, no sólo a los medios y sus periodistas sino a sus fuentes, así
como el derecho a la información que tienen losciudadanos. Frecuentemente, legislaciones demasiado rígidas o
excesivas como Venezuela, Ecuador, Bolivia y otros países con gobiernos
dictatoriales, conspiran encontra de estos derechos fundamentales que están en la base del sistema democrático, y la mayor parte de las veces son inútiles o generan efectos
perversos, cuando la información responsable es sustituida por el rumor y la especulación. En cambio
hay sistemas de autorregulación de la profesión periodística en Austria,
Alemania, Dinamarca, Estonia, España, Francia y Polonia
En
nuestro país antes de la elección de Ollanta Humala se pensó también que
ocurriría un control de los medios pero no ha ocurrido hasta ahora. A mi juicio
la ética periodística
tiene tres partes fundamentales:
1) Respeto a la verdad.
2) Reflejo
de las distintas posiciones sobre un mismo tema.
3) No intromisión
en la vida privada de las personas, salvo si es para exponer un delito o un hecho
que afecte el interés público o el desempeño de las instituciones.
Fórmula
simple en apariencia, pero de compleja aplicación
entre los proveedores de información masiva, influidos por intereses
políticos y comerciales que los impulsan en sentido contrario.
Para
mantener el rumbo, los grandes medios y organizaciones de comunicación de
distintos países se han dotado, desde los inicios del siglo XX, de Códigos de
Ética Periodística editados por millares, que obligan a suspropietarios y
redactores ante la opinión pública y sus lectores en particular, a un determinado comportamiento editorial, que todos conocen y pueden exigir.
Se ha
llegado a afirmar que la mejor ley de prensa es aquella que no se dicta, pero
lejos de ser una actividad desregulada o
carente de normas, el periodismo más íntegro se rige por estrictos
deberes autoimpuestos, que no sólo establecen las “reglas del juego” parasus
periodistas y el marco y límites para el propio medio, sino un compromiso
explícito con la sociedad y la opinión pública, en cuanto a veracidad e
imparcialidad.
En el Perú, podemos citar a los colegios
profesionales, en especial, a los Colegios de Abogados, que cuentan con su
propio Código de Ética; el Defensor del Cliente Financiero, que tienen como
entidades afiliadas a la mayor parte de entidades financieras que concurren en
el país, el actualmente sin efecto “Semáforo Ético” de la Asociación Nacional
de Anunciantes del Perú ANDA, el Consejo de Autorregulación de los medios de
comunicación de la Sociedad Nacional de Radio y Televisión – SNRTV y en la
industria publicitaria, el Consejo Nacional de Autorregulación Publicitaria
CONAR. A través de estos sistemas vemos que los empresarios establecen
voluntariamente unas pautas de conducta, unos cánones éticos que se comprometen
a respetar, estableciendo incluso organismos de control encargados de corregir
y evitar las infracciones.
2.- LA LABOR DEL OMBUDSMAN
El ombudsman trabaja para que las organizaciones sean
más sensibles a las personas a quienes sirven y es una persona que investiga
los reclamos y hace de mediador en conciliaciones. Centra su atención entre
partes agraviadas tales como: un consumidor y una institución que se ve
afectada en su honorabilidad a través de los medios. Recibe la queja de la
persona agraviada y la analiza e investiga luego llama también a la parte que
ocasiona el agravio y luego dictamina un veredicto de acuerdo al grado de
ofensa ocasionado. En algunos canales de televisión del Perú, se han producido
sanciones por haber utilizado escenas de violencia, como lo ocurrido en el
canal Frecuencia latina en el programa “La noche es mía”, donde se emitió
imágenes de violencia producidas por una violación a un niño que incluso le
costó la cabeza al conductor del programa. Otro caso fue las palabras soeces vertidas
por la conductora del programa “Esto es guerra” a través de las redes sociales.
Por eso la autorregulación no queda encerrada entre
cuatro paredes; es de amplio y
extendido conocimiento público, al ser editada como Manual de Estilo o Códigode
Ética, constituyendo un pacto de confiabilidad con los lectores.
Sin
embargo, tanto la libertad de expresión y el derecho a la información no sólo
son amenazadas por actos de autoridad; legislaciones demasiado rígidas o
limitativas de esos derechos. También el fenómeno de la globalización y la
concentración de la propiedad de los medios de comunicación, así como el
influjo de sus propios avisadores y depoderes fácticos de diversa naturaleza,
pueden constituirse en un riesgo para el ejercicio de estos derechos. Lejos de
ser inmunes a la gravitación de las autoridades o los intereses en juego, los medios de comunicación deben cumplir su
trascendente rol social en medio de un fuerte juego de presiones cruzadas, de legítimo origen algunas, y otras no tanto, que naturalmente se presentan en toda relación
social. Así como no existe verdadera libertad de expresión y derecho a la
información sin una pluralidad de medios y fuentes que puedan expresarse, no
está garantizado el correcto funcionamiento de la base material de esta libertad sin un adecuado marco de
conducta ética y profesional
de los medios. Más que sus ganancias, la tecnología o su capital social, el activo más
importante de unmedio de comunicación es su credibilidad. Sin importar su
orientación editorial, unmedio de comunicación no puede renunciar, sin
desvirtuar su naturaleza, a principiosfundantes de la actividad periodística,
como son la objetividad, el pluralismo y la búsqueda
de la verdad.
En nuestro país se
ha dejado librado casi exclusivamente al mercado proveer la base material para el ejercicio de la libertad de expresión y el pluralismo,
confiando en que el profesionalismo de los
medios de comunicación y su necesidad de ser creíbles ante laopinión
pública los obligará a respetar estos principios universalmente aceptados y
queconstituyen la base de su propia legitimidad.Desafortunadamente, casi todos
los medios de comunicación nacional carecen de estosManuales de Estilo o
Códigos de conducta explícitos, cuyo cumplimiento sería exigiblepor la opinión
pública, y que constituyen el marco regulatorio autoimpuesto en el senode los más prestigiados medios de comunicación en
el mundo. Es cierto que entrenosotros existe el Consejo de Ética de los
Medios de Comunicación, así como el Códigode Ética del Colegio de Periodistas y
unos Estatutos de la Asociación Nacional de la Prensa, pero ninguna de esas
instancias sustituye o reemplaza la necesariaautorregulación
de cada medio, que al fijar sus propio marco valórico en el tratamientode
la información permite inhibir legislaciones restrictivas o limitativas de la
libertad de expresión.
El ombudsman protege los derechos
constitucionales y fundamentales de la persona y de la comunidad. Supervisa el
cumplimiento de los deberes de la administración pública. Hace un seguimiento
de la adecuada prestación de servicios públicos a la ciudadanía. Fue en EE UU
donde por primera vez se introdujo el ombudsman en un periódico particular para
atender únicamente las quejas de ese medio. Ha sido en esta segunda forma como
se ha hecho más común en los medios de comunicación de diferentes países del
mundo. En Brasil existe El Observatório da Imprensa un ejemplo interesante del
empoderamiento que se le puede ofrecer a un ciudadano a través de este tipo de
mecanismos. El Observatorio, como entidad civil no-gubernamental, no-corporativa
y no-partidaria, busca acompañar, junto con otras organizaciones de la sociedad
civil, el desempeño del sistema mediático brasileño. Funciona como un fórum
permanente donde los usuarios de los medios, individualmente u organizados en
asociaciones desvinculadas del medio periodístico, pueden manifestarse acerca
de la cobertura de los medios.
3.- MECANISMOS DE
AUTOREGULACION
La ética no es una condición ocasional, sino que debe
acompañar siempre al periodismo, como el zumbido al moscardón” dijo Gabriel
García Márquez, en el anfiteatro de la Fundación para un Nuevo Periodismo
Iberoamericano de Cartagena de Indias, que él sustento hace algún tiempo.
El
periodista como todo los demás demagogos comparte el destino de escapar a toda
clasificación social, pertenece a una casta paria y la “sociedad” juzga siempre
a sus miembros moralmente peores. Pocas personas saben apreciar que la
responsabilidad del periodista es mucho mayor que la del sabio.
Entre 1998 y el 2012 el Tribunal
de Ética del Consejo de la Prensa peruana (CPP) ha resuelto 433 solicitudes de
rectificación y quejas presentadas por ciudadanos que se sintieron agredidos o
difamados por diversas publicaciones periodísticas. Este órgano rector sin
fines de lucro está integrado por personalidades de primer nivel sin vinculación
alguna con el quehacer periodístico ni con la propiedad de los medios. Así
tenemos en la presidencia y vicepresidencia a la presidenta de la Federación
Latinoamericana de Asociaciones de Facultades de Comunicación, Teresa Quiroz, y
al ex presidente del Consejo de Ministros Alfonso de Los Heros,
respectivamente. También lo integran la decana de la Facultad de Comunicación
de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas, Úrsula Freundt-Thurne;
el presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Diego García
Sayán; el ex defendor del Pueblo Walter Albán; y la Defensora del Cliente
Financiero, Graciela Fernández Baca. La secretaria ejecutiva es Kela León y el
asesor jurídico David Álamo.
Han acudido a esta instancia
desde el ciudadano cuyo nombre fue publicitado erróneamente por un medio hasta
congresistas, abogados, militares, médicos, empresarios, políticos,
estudiantes, etc. Sus reclamos son variados, ya sea por una foto, un
titular, el contenido de una nota periodística, un reportaje televisivo, un
reporte radial, incluso de algunas columnas de opinión que contenían
información falsa. Y han quejado tanto a los medios asociados al CPP, y que por
lo tanto se sujetan a la competencia del tribunal, como a los no asociados. En
el caso de los no asociados, el tribunal les consulta sobre la denuncia y
depende de ellos si se someten a los fallos. El trámite dura entre 15 días y un
mes, aunque a veces se extiende más. Los demandantes deben acompañar a su
solicitud de rectificación o queja las copias de las publicaciones motivo de su
reclamo. El tribunal remite la queja al medio demandado y le da un tiempo
determinado para su respuesta. Muchas veces el medio decide hacer la
rectificación, por lo tanto se archiva la queja si el ciudadano se siente
satisfecho con ello. De lo contrario, el tribunal, si encuentra fundado el
reclamo, emite una resolución que debe ser publicada en el medio denunciado.
Los miembros del tribunal se reúnen cada dos semanas para deliberar y emitir
las resoluciones.
A nivel mundial la UNESCO es el único organismo de las
Naciones Unidas que tiene el mandato de defender la libertad de expresión y la
libertad de prensa. Su código presenta como primer principio, el del derecho de
la gente a la información veraz. También apunta a la responsabilidad social del
periodista, entendiendo la información de prensa como bien social y no como un
producto.
Esta responsabilidad requiere que el profesional actúe
conforme a su sentido ético.
La Federación Internacional de Periodistas (FIP), en
su código de conducta para periodistas (adoptado en 1954 y enmendado en 1986)
también asume como principal valor no solo el respeto a la verdad sino también
el derecho del público a la verdad. Asimismo, recalca el deber del periodista
de obtener y publicar honestamente las noticias y utilizar solamente métodos
justos para obtenerlas; divulgar solamente los hechos de los cuales conoce bien
su origen, no suprimir información esencial ni falsificar documentos; hacer
todo lo posible por rectificar cualquier información publicada que se descubra
que puede ser perjudicial por inexacta.
La investigadora en Comunicaciones Rosa
María Alfaro señala que la autorregulación de los medios aplicada desde el CPP
es importante y debe fortalecerse. Incluso, Alfaro considera que deberían
incorporarse periodistas al Tribunal de Ética. Sostiene que hay dos tipos de
propuestas de autorregulación. Una, cuando el propio medio hace su propio
Código de Ética y crea una instancia, como el Tribunal de Ética del CPP.
"Esa instancia le va a permitir que el medio se pueda controlar a sí
mismo, pero no siempre el medio tiene posibilidades concretas para resolver
esos problema", dice. La segunda opción es el Consejo de la Prensa, donde
hay un grupo de ética que ante las quejas de terceros hace el análisis ético de
lo que se trabaja y se toman decisiones al respecto. La tercera es que la
ciudadanía tenga un papel relevante en gestionar, proponer, exigir a los medios
cambios, también de corte ético. Alfaro señala que sobre este tema ella ha
trabajado mucho, a través de Veeduría Ciudadana, logrando un resultado
interesante en la ciudad de Puno. Incluso comenta que la gente de Puno hizo un
pacto ético con diarios y canales de televisión de la zona, y fue muy
interesante porque lograron construir un Código de Ética para esa región, ella
atribuye la poca participación de los ciudadanos en exigir rectificación a los
medios a que la gente lee muy poco en el país.
En estos últimos años que la violencia
se ha visto incrementada y azuzada por los medios de comunicación es necesario
autoregular los medios de comunicación, para evitar que aumente el clima de
violencia. Las estadísticas en conflictos sociales son serias: del 2006 al 2012
se han producido 24 muertos y 649 heridos entre fuerzas del orden y ciudadanos
comunes y corrientes.